¿Cómo puede considerarse un hombre de paz, e incluso ser nominado al Premio Nobel de la Paz, alguien que incita a la división y la destrucción? ¿Cómo puede proclamarse defensor de la paz mientras abre simultáneamente las “puertas del infierno”? Tal vez esta sea la única experiencia que realmente comprende, porque si alguna vez hubiera conocido el cielo, no hablaría ni actuaría de esa manera.
Como cristiano palestino y seguidor de Jesucristo, creo en la paz, la justicia y el amor, incluso por los enemigos. Cristo, nuestro Líder Siervo, sufrió en la cruz para salvar al mundo, enseñándonos a abrazar la no violencia y a defender la justicia. Por eso lo seguimos, lo adoramos y lo alabamos.
Señor Presidente, sus palabras y acciones contradicen la esencia misma de la paz:
- Trump amenaza con el “infierno” a todos los palestinos en Gaza.
• Trump propone que EE.UU. tome el control de Gaza y sugiere que todos los palestinos deberían irse.
• Trump: EE.UU. “tomará” Gaza, la arrasará y creará “la Riviera de Oriente Medio”.
• Trump advierte que “se desatará el infierno”.
• El impulso de Trump por despedir empleados federales.
• Represión contra empleados federales: despedidos en reuniones virtuales y con solo 30 minutos para desalojar.
• Trump está a punto de asestar otro golpe devastador a los ucranianos.
• Trump considera revocar el estatus legal de 240,000 ucranianos.
Como republicano estadounidense, le hago un llamado: tenga misericordia del pueblo estadounidense, palestino y ucraniano. La verdadera fortaleza radica en la justicia y la compasión, no en la crueldad y la destrucción.
Durante esta Cuaresma, que Dios bendiga a los estadounidenses, a los ucranianos y, especialmente, a los palestinos, que son quienes más están sufriendo.
Bendiciones para todos.
Rateb Y. Rabie, KCHS